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5 en 14 Reseñas
Galletas de limón y arándanos con chispas de chocolate blanco
¡Rebosante de sabor, literalmente! ¡El sabor a limón se adapta perfectamente para complementar los arándanos frescos que se encuentran en estas deliciosas galletas!
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Instrucciones
En un tazón grande, o en el tazón de su batidora de pie, mezcle la mantequilla ablandada y el azúcar hasta que quede suave y esponjoso. Agregue los huevos batidos, el bicarbonato de sodio, la sal, el extracto de limón y la ralladura de limón y mezcle hasta que quede cremoso y suave.
Agregue la harina para todo uso a la mezcla húmeda y combine hasta que la harina esté completamente incorporada, luego agregue las chispas de chocolate blanco y mezcle hasta que se distribuya uniformemente por toda la masa de galletas. Use una cuchara para agregar suavemente los arándanos frescos, teniendo cuidado de no romperlos. Enfríe el arándano limón combinado con la masa de galleta con chispas de chocolate blanco en el refrigerador durante al menos una hora.
Precaliente su horno a 375 grados F (190 grados C) y forre una bandeja para hornear (o dos) con papel pergamino. Coloque la masa en cantidades de cucharaditas colmadas sobre las bandejas para hornear forradas con papel pergamino, dejando aproximadamente 2 pulgadas entre las galletas. Espolvoree azúcar gruesa (opcional) más la ralladura adicional de otro limón sobre la masa de galletas antes de hornear.
Hornee en su horno precalentado durante 9-11 minutos, o hasta que comience a dorarse en el borde inferior. Retire del horno y deje enfriar en la bandeja para hornear durante 2-3 minutos antes de transferir a una rejilla de alambre para enfriar por completo. Servir inmediatamente.
Notas
* Almacene en un recipiente hermético y mantenga refrigeradas las galletas restantes. Se mantendrá refrigerado durante 5 días.