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5 en 21 Reseñas
Galletas De Melaza De Jengibre
Estas galletas de melaza de jengibre son suaves, masticables y están llenas de toneladas de especias calientes para una galleta que seguramente será la favorita de la multitud. ¡Tienen un sabor dulce y reconfortante! ¡Sin mencionar que se pueden preparar con anticipación y almacenar en el congelador para que pueda disfrutarlos cuando lo desee!
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Instrucciones
Precaliente su horno a 350°F (175 ° C) y forre una bandeja para hornear con papel pergamino.
Usando una batidora eléctrica, mezcle la mantequilla a temperatura ambiente, el azúcar moreno y el azúcar hasta que quede suave y cremoso.
Agregue el huevo y bata hasta que esté bien combinado. Luego, mezcle el bicarbonato de sodio, el jengibre molido, el clavo molido, la canela molida y la sal. Finalmente, agrega la melaza y el jugo de naranja y vuelve a mezclar hasta que todo se incorpore.
Tamice la harina en la mezcla húmeda en pequeños incrementos y use una cuchara para mezclar todo suavemente, teniendo cuidado de no mezclar demasiado la masa.
Transfiera todo el tazón al refrigerador y deje que la masa se enfríe durante aproximadamente 30 minutos.
Saque la masa en porciones de 1½ cucharada y enróllelas en una bola. Coloque aproximadamente 2 cucharadas de azúcar granulada en un plato poco profundo y enrolle las bolas de masa en el azúcar hasta que estén completamente cubiertas.
Coloque las bolas en la bandeja para hornear preparada con aproximadamente 2 pulgadas de espacio entre ellas. Use sus manos o el fondo de un vaso para aplanar ligeramente la parte superior.
Hornee en el horno precalentado a 350 ° F (175 ° C) durante 8-10 minutos, girando las bandejas a la mitad de la cocción.
Retire las galletas del horno y déjelas enfriar en la bandeja durante 5 minutos antes de transferirlas a una rejilla para que terminen de enfriarse.
Notas
Si lo desea, puede esperar hasta que sus galletas se hayan enfriado por completo y luego sumergirlas en chocolate blanco derretido para un regalo especial.
Cada vez que esté horneando, asegúrese de medir correctamente la harina para obtener los mejores resultados. Para hacerlo, esponja la harina con una cuchara y úsala para verterla en la taza medidora antes de nivelar la parte superior. Alternativamente, puede usar una balanza de cocina para pesarlo.
Enfriar la masa es crucial para hacer que la masa para galletas sea fácil de enrollar y ayuda a evitar que se extienda demasiado en el horno. Incluso puedes dejar que se enfríe durante unas horas si quieres.
Para almacenar: Mantenga sus galletas de melaza de jengibre almacenadas en un recipiente sellado a temperatura ambiente hasta por 5 días.
Para congelar: coloque sus galletas en una bolsa o recipiente de almacenamiento y congele hasta por 2 meses. Descongele cuando esté listo para servir.
Para congelar la masa para galletas: Enrolle la masa en bolas (pero no en el azúcar granulada) y colóquelos en una bandeja para hornear. Congele durante aproximadamente 3 horas, o hasta que esté sólido. Luego, transfiera la masa a una bolsa de almacenamiento por hasta 2 meses.
Para hornear congelado: transfiera su masa de galletas congelada al mostrador durante unos 10-15 minutos para dejar que las bolas se descongelen un poco para que estén pegajosas. Enróllalos en azúcar granulada y hornéalos como se indica, agregando alrededor de 1 a 2 minutos al tiempo de horneado.
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